lunes, 28 de diciembre de 2009

Ponerse una pizzeria (el sueño de todo fletero)

hablar de los objetivos de cada persona, es algo bastante subjetivo.
que valga la redundancia de esta primera oracion
pero tenia ganas de empezar asi.
uno tal vez no lo imagina pero hay muchas tribus por inventarse y muchas que ya estan inventadas.
yo decidi poner en marcha mi sueño.
hice una lista de las cosas necesarias, que no son muchas.
un poco de plata, stock de harina y queso, un amigo, otro amigo, una moto, un telefono que masomenos ande, un par de ilusiones y un poco de suerte.
tengo el lugar, un galponcito que Juan ya no usa.
una foto del gauchito don antonio para que nos proteja
dos delantales, uno me lo regalaron comprando un juego de cuchillos.
y no mucho mas. paciencia y voluntad
ya me imagino la inauguracion...
no puedo esperar mas.. se imaginan? es la pizzeria del pueblo!
en el medio de la ciudad, una pizzeria de dos chaboncitos... se me pone la piel de gallina
van a venir todos los chicos, uno amasa y el otro atiende a la gente
nos levantamos temprano, siempre con una sonrisa.
tenemos nuestra heladerita, nuestra pileta. nuestro jabon.
hay algo mas sensacional que levantarte a la mañana y lavarte las manos?
mas que nada si despues te las vas a llenar de harina.
te diria que es casi sensual observar el hornito cocinar la masa, como empieza a transformarse en delicia de un segundo para el otro, como el queso abraza al pan, y este se empieza a poner coloradito, se empieza a calentar, se infla, pero es tan delicado que no llega a explotar dejando el placer en la punta de la lengua, para que puedan disfrutarlo esos estomagos del bajo bilinghurst.
¡esta pizza se come en familia carajo!
asi van a gritar los amigos cuando se sienten en el poco lugar que tenemos..
el lugar es chico pero el corazon es grande, no?
ahh me olvidaba! hay algo que no saben!
los vamos a recibir a todos con smoking moño y galera!
estan invitados a venir!
que viva la pizza!
que viva el ska!

Cheffing Crud.

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